Escipión El Africano: ¿En qué posición te colocarías, Aníbal, si no hubieras sido derrotado por mí?
Aníbal Barca: En ese caso me habría colocado colocado incluso por delante de Alejandro Magno.
- Presunto encuentro en Éfeso entre Aníbal Barca y Publio Cornelio Escipión, discusión sobre los mejores generales de la Historia.
Año 2006. El campeón del mundo de los pesos pesados, Mason Dixon, no da crédito ante una iniciativa de la ESPN. Invicto defensor del título, se sorprende de que el programa virtual de recreación de combates entre estrellas pugilísticas de todos todos los tiempos le haga perder ante un popular boxeador del pasado. ¿Su nombre? Rocky Balboa. ¿El lugar? La célebre franquicia sobre El Potro Italiano que iba superando los estragos del cuadrilátero con una gran perseverancia. Aunque algunos pensaron que la trama de la sexta parte era hiperbólica y nadie se tomaría tan en serio una simulación, la realidad suele superar a la ficción.
Recientemente, nada menos que 200.000 personas observaron con sumo interés la recreación de un combate virtual que traía a dos leyendas en su mejor estado de forma: Muhammad Ali frente a Mike Tyson. EA Sports, en el contexto del parón por el coronavirus, brindó la "Fight Night Champion", donde hubo varios combates de leyenda, hallando en la velada nombres titánicos como Lennox Lewis, Butterbean, etc.
En verdad, el asunto tuvo ingenio y comenzó con unos cuartos de finales intensos, donde pudo apreciarse la evolución de la industria del videojuego para personalizar movimientos e incluso los gestos de los mitos deportivos. La finalísima llevó a Tyson a batir a Ali en doce disputados rounds resueltos mediante la tarjeta de los jueces. ¿Qué opinaba afición, expertos y otros profesionales? De haberse podido dar el choque de leyendas, ¿el resultado habría sido ese?
"Nos proyectaron la película The Greatest, sobre Muhammad Ali. Al acabar nos pusimos todos a aplaudir y nos quedamos de piedra cuando Ali en persona subió al escenario. No parecía de este planeta."- Mike Tyson, Toda la verdad.
En un juego delicioso, estas elecciones tienen un riesgo. Bueno o malo. Limitar a dos opciones evita los necesarios tonos grises. Hay cosas positivas y otras espectaculares. Pequeños reveses y catástrofes terribles. Elegir entre dos iconos no debería significar que la persona desestimada no sea muy admirada por el elector/a. Recientemente, un sagaz tweet se divertía con un debate generacional entre dos escuelas: un bando se negaba a ver las antiguas hazañas de Michael Jordan; el otro, regateaba cualquier mérito a Lebron. En la realidad, cuesta pensar que alguien emocionado con los vuelos del 23 no disfrutase en esa misma disciplina con la versatilidad del actual jugador de los Lakers.
Mike Tyson ha tenido pocos ídolos en su trayectoria. Niño criado en un ambiente marginal, de personalidad introvertida, se vio obligado a crecer deprisa y convertirse en una presencia juvenil típica de los correccionales. Sin embargo, allí pudo conocer a Ali. Más allá del inmaculado balance de victorias de Mayweather, las hazañas en distintas categorías de Pacquiao o las heroicidades del mexicano Julio César Chávez, Ali, en muchos mentideros, sigue siendo El Más Grande. Porque logró trascender a su deporte y estuvo en un contexto histórico, social y político tan delicado como el movimiento por los derechos civiles y la guerra del Vietnam.
De hecho, en su precoz asalto al título, una de las motivaciones del joven Mike Tyson fe vencer a Trevor Berbick, el hombre que había hecho terminar la legendaria carrera de Ali con una derrota. Aquel episodio fue bautizado como "Drama en las Bahamas", fruto del cariño que tenía la afición por un ídolo ya en el ocaso de forma física. Angelo Dundee, quien había tenido el privilegio de trabajar con Sugar Ray y el mismísimo Ali, afirmó que nunca antes vio combinaciones de tres golpes tan imprevisibles como las de aquel joven. Pero hasta ese momento, el por entonces preparador de Berbick se había dedicado a despreciarlo, típico juego psicológico. Y es que otra pregunta clave, que incluso el videojuego más realista no puede manejar es, ¿quién estaría en la esquina de los campeones?
"Transformar la chispa en llama y, más tarde, la llama en fuego"- Cus D´Amato.
Cuentan que fue una venganza terrorífica. La de un veterano entrenador que, muchas veces, fue traicionado por incipientes estrellas a las que formó. Bobby Stewart, ex boxeador y preparador físico, le habló a Cus D´Amato del diamante en bruto que existía en la escuela Tryon, un reformatorio. Desde la primera práctica, D´Amato marcó la ruta para el campeonato, seguro de que estaba ante la oportunidad anhelada durante toda su existencia. La defensa con los antebrazos en el rostro y los tomahawk que aterraron a algunos de los mejores luchadores del momento. Simplemente, como profesional, Tyson jamás perdió con el viejo maestro en su esquina. Se necesitaban y su fallecimiento fue una estocada brutal para el pupilo, antes incluso de que pudiera verle con el cinturón de ganador.
Eran el zumbido más pesado que el oso feroz había escuchado en mucho tiempo. Por aquellos días, todo Estados Unidos sabía que no convenía incordiar a Sonny Liston. Aquel muchacho, susurrado por otro excéntrico, no dejaba de hablar y hablar. Jackie Gleason, inmortalizado por su papel en El buscavidas, criticaba sin parar a aquel charlatán de feria que iba a subirse al ring sin el respeto debido. Después, escribiría una crónica admitiendo su error, pues es propio de un gran intérprete reconocer a otro. Ali y Drew Bundini jugaron a ser locos cuando estaban más que cuerdos y preparando el combate de sus vidas.
No solamente venció a un Liston que estaba en un momento intratable. El entonces llamado Cassius Clay, acabó sin ninguna marca en el rostro. Desde entonces, su comunión con la grada fue total. Igual que Mayweather en el futuro, demostró que podía ser el villano y llenar butacas sin problemas. Sin embargo, a diferencia del dueño y señor de Las Vegas, podía meterse al público en el bolsillo con idéntica elegancia. Su carisma era contagioso. Las ruedas de prensa habrían sido dignas de verse, incluso incombustibles como Foreman acabaron agotados de aquellas ráfagas verbales. Con todo, aquel primer Tyson solamente tenía un objetivo entre ceja y ceja.
Living and Dying By the Jab
La altura. Un primer intento de acercamiento al hipotético planteamiento lleva a imaginar la ventaja de centímetros de Ali, un maestro del jab, quien podría haber provocado serias dudas iniciales con respecto a Tyson. A diferencia de otras torres, él combinaba la envergadura con gracia en sus movimientos, algo que le impedía ser presa fácil de rivales veloces. De cualquier modo, ya fue el ojo clínico de Cus D´Amato el que profetizó su primer descalabro ante Frazier, un fallo al buscar el uppercut. Ali cometía pocos errores, pero el más mínimo podía ser peligroso ante un oponente que, en aquellos primeros días, habría seguido ciegamente cualquier instrucción de su esquina.
Con todo, si bien eso le costó no saber retirarse a tiempo o arriesgar más de la cuenta en peleas que podría haber ganado de otra forma, la temeraria capacidad que Ali demostró a su regreso lo hacía único. Cuando el mundo esperaba que bailase, fue capaz de ponerse en el abismo ante dos trituradoras como George Foreman y Joe Frazier. Por mucho pánico que supiera generar el hombre que vestía todo oscuro, otra genial intuición de su técnico, no habría sido ningún infierno que su adversario no conociese de antemano. Frank Bruno, admirador del poderío de Tyson, señaló tras el combate simulado que no podría ir en un pronóstico contra Ali porque era "El Padrino" de este deporte.
En un análisis realmente interesante y recomendable, Jack Slack recuerda los originales movimientos de Tyson de bajar las rodillas y esquivar, algo que podría haber empleado con habilidad ante otra de las heterodoxias de Ali: buscar las cuerdas. Los textos clásicos del pugilismo afirmaban que quemaban y podían ser la clave de la derrota, pero en su caso era una forma de conseguir un aire extra y desgastar al adversario. Además, tampoco habría sido fácil para Ali arrinconar en ellas a un adversario rápido que, en su mejor momento de motivación, tenía tendencia a inclinarse la izquierda y hacer trabajar su gancho de derecha para salir airoso. Deontay Wilder, un bombardero humano, señalizaba que no era descabellado intuir un momento de noquear por parte de Iron.
"Sé que soy grande, pero, cuando hablamos de él, todos tenemos que mordernos la lengua. Es el mejor que ha existido"- Mike Tyson.
En ocasiones, es una pequeña desilusión. Cuando alguien ha sido excepcional en su disciplina, verle ningunear méritos de personas que le suceden suena a tacañería innecesaria. Que Nadia Comaneci sea la fan número uno de un prodigio como Simone Biles, solamente atestigua, aunque ya se sabía, que la espectacular gimnasta rumana es una fuera de serie. Si bien se dedicó a publicitar su imagen del villano más temido del ring, Tyson se convertía en un niño divertido cada vez que estaba en presencia de Ali.
Durante una infancia marcada por abusos y delincuencia, en un correccional donde había pocos estímulos, aquella película y esa aparición en persona le dieron una meta. Más que pensar en el enfrentamiento, habría sido bonito imaginar qué hubiera pasado si, como acontece en Creed, la leyenda se dedicase a pulir a otro campeón. Imaginen, El Más Grande en la esquina del terror de Brooklyn. Tal vez la historia habría sido otra.
No obstante, la realidad nunca es tan simple. Ni siquiera Ali fue siempre Ali. En una ocasión, dejó unas aberrantes declaraciones sobre su opinión acerca las relaciones interraciales. No tiene nada de extraño que alguien obligado a portar el apellido de quienes explotaron a sus antepasados en plantaciones de algodón y ha sufrido discriminación, sucumba a la humana necesidad de devolver el golpe. Los años, la madurez y su inteligencia natural le modificaron y le convirtieron en un símbolo universal. La caída de Tyson sí fue brutal y no halló esa esencia para servir de inspiración.
"El honor de la derrota de Napoleón le corresponde al propio emperador con su decisión de invadir Rusia"- Andrew Roberts.
Tratemos de no subestimar a Buster Douglas. Nadie podrá quitarle nunca su valentía alcanzando un hito histórico. No obstante, la debacle de Tyson fue otra bien distinta, una bien conocida. Dinero a espuertas y fama, séquitos sedientos de estar alrededor. D´Amato había dejado los mejores consejos en el ring, pero ni siquiera él veló por desvelarle que había más allá del deporte. Era la clave para un viaje sin frenos a la bancarrota y la autodestrucción, llevando varias vidas y reputaciones por el camino.
Su viejo técnico le hablaba del fuego. Un arma prometeica si se utiliza a favor. Capaz de abrasarte si la descuidas. Tyson pagó con la cárcel y, al volver, quedaban cenizas de aquella llama que, bien empleada, habría podido competir con la leyenda de Ali y la de cualquiera. Incluso todavía hoy sigue poseyendo una pegada letal, escalofriante.
Siempre podremos imaginar aquella noche donde Tyson fue al cementerio con una copa de champán para celebrar su prematuro título. ¿Qué habría pasado si, siguiendo la estela de Bundini, hubiera aparecido Ali para prometer llevarle a la tierra prometida?
En un juego delicioso, estas elecciones tienen un riesgo. Bueno o malo. Limitar a dos opciones evita los necesarios tonos grises. Hay cosas positivas y otras espectaculares. Pequeños reveses y catástrofes terribles. Elegir entre dos iconos no debería significar que la persona desestimada no sea muy admirada por el elector/a. Recientemente, un sagaz tweet se divertía con un debate generacional entre dos escuelas: un bando se negaba a ver las antiguas hazañas de Michael Jordan; el otro, regateaba cualquier mérito a Lebron. En la realidad, cuesta pensar que alguien emocionado con los vuelos del 23 no disfrutase en esa misma disciplina con la versatilidad del actual jugador de los Lakers.
Mike Tyson ha tenido pocos ídolos en su trayectoria. Niño criado en un ambiente marginal, de personalidad introvertida, se vio obligado a crecer deprisa y convertirse en una presencia juvenil típica de los correccionales. Sin embargo, allí pudo conocer a Ali. Más allá del inmaculado balance de victorias de Mayweather, las hazañas en distintas categorías de Pacquiao o las heroicidades del mexicano Julio César Chávez, Ali, en muchos mentideros, sigue siendo El Más Grande. Porque logró trascender a su deporte y estuvo en un contexto histórico, social y político tan delicado como el movimiento por los derechos civiles y la guerra del Vietnam.
De hecho, en su precoz asalto al título, una de las motivaciones del joven Mike Tyson fe vencer a Trevor Berbick, el hombre que había hecho terminar la legendaria carrera de Ali con una derrota. Aquel episodio fue bautizado como "Drama en las Bahamas", fruto del cariño que tenía la afición por un ídolo ya en el ocaso de forma física. Angelo Dundee, quien había tenido el privilegio de trabajar con Sugar Ray y el mismísimo Ali, afirmó que nunca antes vio combinaciones de tres golpes tan imprevisibles como las de aquel joven. Pero hasta ese momento, el por entonces preparador de Berbick se había dedicado a despreciarlo, típico juego psicológico. Y es que otra pregunta clave, que incluso el videojuego más realista no puede manejar es, ¿quién estaría en la esquina de los campeones?
"Transformar la chispa en llama y, más tarde, la llama en fuego"- Cus D´Amato.
Cuentan que fue una venganza terrorífica. La de un veterano entrenador que, muchas veces, fue traicionado por incipientes estrellas a las que formó. Bobby Stewart, ex boxeador y preparador físico, le habló a Cus D´Amato del diamante en bruto que existía en la escuela Tryon, un reformatorio. Desde la primera práctica, D´Amato marcó la ruta para el campeonato, seguro de que estaba ante la oportunidad anhelada durante toda su existencia. La defensa con los antebrazos en el rostro y los tomahawk que aterraron a algunos de los mejores luchadores del momento. Simplemente, como profesional, Tyson jamás perdió con el viejo maestro en su esquina. Se necesitaban y su fallecimiento fue una estocada brutal para el pupilo, antes incluso de que pudiera verle con el cinturón de ganador.
Eran el zumbido más pesado que el oso feroz había escuchado en mucho tiempo. Por aquellos días, todo Estados Unidos sabía que no convenía incordiar a Sonny Liston. Aquel muchacho, susurrado por otro excéntrico, no dejaba de hablar y hablar. Jackie Gleason, inmortalizado por su papel en El buscavidas, criticaba sin parar a aquel charlatán de feria que iba a subirse al ring sin el respeto debido. Después, escribiría una crónica admitiendo su error, pues es propio de un gran intérprete reconocer a otro. Ali y Drew Bundini jugaron a ser locos cuando estaban más que cuerdos y preparando el combate de sus vidas.
No solamente venció a un Liston que estaba en un momento intratable. El entonces llamado Cassius Clay, acabó sin ninguna marca en el rostro. Desde entonces, su comunión con la grada fue total. Igual que Mayweather en el futuro, demostró que podía ser el villano y llenar butacas sin problemas. Sin embargo, a diferencia del dueño y señor de Las Vegas, podía meterse al público en el bolsillo con idéntica elegancia. Su carisma era contagioso. Las ruedas de prensa habrían sido dignas de verse, incluso incombustibles como Foreman acabaron agotados de aquellas ráfagas verbales. Con todo, aquel primer Tyson solamente tenía un objetivo entre ceja y ceja.
Living and Dying By the Jab
La altura. Un primer intento de acercamiento al hipotético planteamiento lleva a imaginar la ventaja de centímetros de Ali, un maestro del jab, quien podría haber provocado serias dudas iniciales con respecto a Tyson. A diferencia de otras torres, él combinaba la envergadura con gracia en sus movimientos, algo que le impedía ser presa fácil de rivales veloces. De cualquier modo, ya fue el ojo clínico de Cus D´Amato el que profetizó su primer descalabro ante Frazier, un fallo al buscar el uppercut. Ali cometía pocos errores, pero el más mínimo podía ser peligroso ante un oponente que, en aquellos primeros días, habría seguido ciegamente cualquier instrucción de su esquina.
Con todo, si bien eso le costó no saber retirarse a tiempo o arriesgar más de la cuenta en peleas que podría haber ganado de otra forma, la temeraria capacidad que Ali demostró a su regreso lo hacía único. Cuando el mundo esperaba que bailase, fue capaz de ponerse en el abismo ante dos trituradoras como George Foreman y Joe Frazier. Por mucho pánico que supiera generar el hombre que vestía todo oscuro, otra genial intuición de su técnico, no habría sido ningún infierno que su adversario no conociese de antemano. Frank Bruno, admirador del poderío de Tyson, señaló tras el combate simulado que no podría ir en un pronóstico contra Ali porque era "El Padrino" de este deporte.
En un análisis realmente interesante y recomendable, Jack Slack recuerda los originales movimientos de Tyson de bajar las rodillas y esquivar, algo que podría haber empleado con habilidad ante otra de las heterodoxias de Ali: buscar las cuerdas. Los textos clásicos del pugilismo afirmaban que quemaban y podían ser la clave de la derrota, pero en su caso era una forma de conseguir un aire extra y desgastar al adversario. Además, tampoco habría sido fácil para Ali arrinconar en ellas a un adversario rápido que, en su mejor momento de motivación, tenía tendencia a inclinarse la izquierda y hacer trabajar su gancho de derecha para salir airoso. Deontay Wilder, un bombardero humano, señalizaba que no era descabellado intuir un momento de noquear por parte de Iron.
"Sé que soy grande, pero, cuando hablamos de él, todos tenemos que mordernos la lengua. Es el mejor que ha existido"- Mike Tyson.
En ocasiones, es una pequeña desilusión. Cuando alguien ha sido excepcional en su disciplina, verle ningunear méritos de personas que le suceden suena a tacañería innecesaria. Que Nadia Comaneci sea la fan número uno de un prodigio como Simone Biles, solamente atestigua, aunque ya se sabía, que la espectacular gimnasta rumana es una fuera de serie. Si bien se dedicó a publicitar su imagen del villano más temido del ring, Tyson se convertía en un niño divertido cada vez que estaba en presencia de Ali.
Durante una infancia marcada por abusos y delincuencia, en un correccional donde había pocos estímulos, aquella película y esa aparición en persona le dieron una meta. Más que pensar en el enfrentamiento, habría sido bonito imaginar qué hubiera pasado si, como acontece en Creed, la leyenda se dedicase a pulir a otro campeón. Imaginen, El Más Grande en la esquina del terror de Brooklyn. Tal vez la historia habría sido otra.
No obstante, la realidad nunca es tan simple. Ni siquiera Ali fue siempre Ali. En una ocasión, dejó unas aberrantes declaraciones sobre su opinión acerca las relaciones interraciales. No tiene nada de extraño que alguien obligado a portar el apellido de quienes explotaron a sus antepasados en plantaciones de algodón y ha sufrido discriminación, sucumba a la humana necesidad de devolver el golpe. Los años, la madurez y su inteligencia natural le modificaron y le convirtieron en un símbolo universal. La caída de Tyson sí fue brutal y no halló esa esencia para servir de inspiración.
"El honor de la derrota de Napoleón le corresponde al propio emperador con su decisión de invadir Rusia"- Andrew Roberts.
Tratemos de no subestimar a Buster Douglas. Nadie podrá quitarle nunca su valentía alcanzando un hito histórico. No obstante, la debacle de Tyson fue otra bien distinta, una bien conocida. Dinero a espuertas y fama, séquitos sedientos de estar alrededor. D´Amato había dejado los mejores consejos en el ring, pero ni siquiera él veló por desvelarle que había más allá del deporte. Era la clave para un viaje sin frenos a la bancarrota y la autodestrucción, llevando varias vidas y reputaciones por el camino.
Su viejo técnico le hablaba del fuego. Un arma prometeica si se utiliza a favor. Capaz de abrasarte si la descuidas. Tyson pagó con la cárcel y, al volver, quedaban cenizas de aquella llama que, bien empleada, habría podido competir con la leyenda de Ali y la de cualquiera. Incluso todavía hoy sigue poseyendo una pegada letal, escalofriante.
Siempre podremos imaginar aquella noche donde Tyson fue al cementerio con una copa de champán para celebrar su prematuro título. ¿Qué habría pasado si, siguiendo la estela de Bundini, hubiera aparecido Ali para prometer llevarle a la tierra prometida?
BIBLIOGRAFÍA:
- RODRÍGUEZ, J., Quédate en el ring, Ediciones Pàmies, Madrid, 2013.
- REMNICK, D., Rey del mundo: Muhammad Ali y el nacimiento de un héroe americano, Debolsillo, Barcelona, 2010.
ENLACES DE INTERÉS:
- A brutally Honest Look at Mike Tyson versus Muhammad Ali [Propiedad del artículo: Jack Slack] [Consultado el 27/04/2020]
- El terror de Brooklyn
- ¿Podría Tyson derrotar a Ali? [Propiedad del artículo: Alan Dawson] [Consultado el 26/04/2020]
- Muhammad Ali, Sugar Ray Leonard and Mike Tyson on Arsenio Hall Show [Propiedad del vídeo: MyInnerEyeInterview2] [Consultado el 27/04/2020]
- ¿Tyson o Ali? [Propiedad del artículo: Diario Marca] [Consultado el 03/05/2020]
- ¿Tyson o Ali? [Propiedad del artículo: Diario Marca] [Consultado el 03/05/2020]
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-https://imasportsphile.com/boxing-1974-the-rumble-in-the-jungle-ali-vs-foreman-marv-albert-interviews-angelo-dundee/ [Propiedad de la fotografía: ImaSportphile] [Consultada el 27/04/2020]
-https://www.pinterest.es/pin/447404544225454062/ [Propiedad de la fotografía: Pinterest] [Consultada el 27/04/2020]
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- https://us.as.com/us/2020/04/13/masdeporte/1586740213_966138.html [Propiedad de la fotografía: Diario As] [Consultada el 27/04/2020]
- https://www.youtube.com/watch?v=H7pW-ApuBvY [Propiedad del vídeo: NcCrullex] [Consultada el 27/04/2020]
-https://imasportsphile.com/boxing-1974-the-rumble-in-the-jungle-ali-vs-foreman-marv-albert-interviews-angelo-dundee/ [Propiedad de la fotografía: ImaSportphile] [Consultada el 27/04/2020]
-https://www.pinterest.es/pin/447404544225454062/ [Propiedad de la fotografía: Pinterest] [Consultada el 27/04/2020]
-https://www.facebook.com/BoxeoDCampeones/posts/1320681851329039/ [Propiedad de la fotografía: @BoxeoDCampeones] [Consultada el 27/04/2020]
- https://us.as.com/us/2020/04/13/masdeporte/1586740213_966138.html [Propiedad de la fotografía: Diario As] [Consultada el 27/04/2020]
- https://www.youtube.com/watch?v=H7pW-ApuBvY [Propiedad del vídeo: NcCrullex] [Consultada el 27/04/2020]
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