lunes, agosto 15

El superviviente de Saitama




El Carioca Arena estaba disfrutando de un encuentro mucho más igualado de lo que predecían las casas de apuestas. Doug Collins, comentarista de lujo para Estados Unidos, advertía del rejuvenecimiento de un David Andersen espectacular y, en líneas generales, el brillante planteamiento de la selección australiana en aquel tercer encuentro de la fase de grupos de los Juegos Olímpicos de 2016. Los pupilos de Mike Krzyzewski estaban en apuros como llevaban tiempo sin hacerlo, habida cuenta de su último y apabullante Mundial. Incluso un gurú defensivo como Tom Thidobeau meneaba la cabeza en la banca con gesto de preocupación. Sin embargo, el superviviente del último gran revés de un conjunto USA en Saitama estuvo toda la noche trabajando para evitar la debacle del proyecto que Jerry Colangelo diseñase años atrás para recuperar la hegemonía de los NBA en los campeonatos internacionales. Simplemente, Carmelo Anthony no permitió que Bogut y cía se llevasen un más que merecido triunfo. 



Small forward de poco más de dos metros de altura y muñeca fina, Melo encontró hasta en nueve ocasiones la vía del triple para salvaguardar a los suyos. Es cierto que el increíble Kyrie Irving hizo un revival de su brillante acción en las pasadas Finales para salvaguardar a los estadounidenses, pero convendremos en que fue Melo quien les llevó a llegar vivos a esas instancias. Mucho tiempo atrás, el inefable Andrés Montes apodo "Caramelo" a aquel jovencito drafteado en la espléndida cosecha de 2003, afirmando que aquel chico de sonrisa traviesa y nacido en Brooklyn con pasado portorriqueño en su árbol genealógico iba a endulzar durante muchos partidos la trayectoria de su franquicia, los Denver Nuggets. 



De cualquier modo, a pesar de lucir dos oros olímpicos en su CV y estar en inmejorables condiciones de intentar un tercer asalto, no pocos mentideros han acusado a nuestro protagonista de hoy de no haber cumplido las expectativas puestas en él, sobre todo comparado con dos compañeros de generación: Lebron James y Dwyane Wade. Y es que hubo un tiempo en que Michael Jordan prefería apadrinar a este tirador excepcional (con las distancias de la NBA es muy bueno, con reglas FIBA virtualmente puede anotar desde cualquier punto de la pista) que al mismísimo genio nacido en Akron. Anthony se ha defendido recientemente al afirmar que la falta de un anillo no le menoscabaría para ser considerado uno de los grandes, habida cuenta de su intachable hoja de servicios con su país. Razones no le faltan. 


La bendición de Black Mamba



"Ya pueden tachar a Carmelo de la lista de buenos jugadores e incluirle en la de los grandes". Las palabras fueron pronunciadas por Chauncey Billups en los Playoffs de 2009. Tras avasallar a los Hornets y los Mavericks con un estilo de juego contundente, guiados bajo la sabia batuta de George Karl en el banquillo, Denver Nuggets cumplía al fin las expectativas que muchos habían puesto en Melo, el hombre que debía ser el encargado de llevarles a la tierra prometida del anillo. El liderazgo y veteranía de Billups, venido desde los Pistons, había descargado presión sobre los hombros de una joven estrella que ya no se sentía solo. Muy bien rodeado y con músculo a su alrededor (Kenyon Marten, El Pájaro Andersen, Nenê Hilario...) el dorsal 15 de Denver se atrevía a desafiar a los poderosos Lakers de Kobe Bryant y Pau Gasol. Era su primer duelo en la cumbre de la competitividad dentro de una liga donde ya había sido All Star. 



Bryant se encontraba en aquellos días en la madurez y cúspide de su juego. Cómodo en su rol al fin de único líder en LA, perfectamente avenido con compañeros del calibre de Lamar Odom o el propio Pau, se trataba de una presencia casi indefendible. Anthony aceptó el reto en un duelo de pistoleros del Far West donde el talento para encontrar el aro contrario se puso a prueba. Fueron seis partidos muy duros donde se impuso la mayor experiencia de Los Ángeles, especialmente reflejado en dos robos decisivos de Trevor Ariza que hubiera podido cambiar completamente el color de la serie. Animal competitivo feroz, sorprendió ver a Black Mamba muy solícito con un Melo que apenas contenía las lágrimas. De entre sus jóvenes rivales, el Bryant más maduro acogió a unos cuantos elegidos, Carmelo, compañero de selección en dos Olimpiadas, es uno de sus favoritos, hasta el punto de que Kobe se enemistó con el Pepsi Center por atreverse a abuchear a Anthony. 



Y es que cuando toda la conferencia Oeste pensaba que los Nuggets-Lakers podían tornarse en un clásico durante las siguientes campañas, los primeros se desintegraron con una rapidez increíble. Volverían, pero ya con un modelo y plantilla distinto, con un Melo que hacía las maletas rumbo a New York, siendo acompañado por el propio Billups. En la Gran Manzana siguió anotando con fluidez y teniendo problemas incluso para clasificarse para los Playoffs. Hubo una excelente excepción en la campaña 2012/13, donde, muy lastrados por las lesiones, los Knicks batallaron bravamente las semifinales del Este. Rodeado de excelentes veteranos aquel año, volvió a decirse que Carmelo funciona mejor a su aire, teniendo otras voces para orientar al vestuario y dejando que él haga lo que mejor sabe, ver el aro como una piscina. 


Legado olímpico




Una cosa no se puede poner en duda de Melo en sus tres Olimpiadas: no ha parado de anotar. Como aquel día en Londres donde firmó 37 puntos en apenas 14 minutos ante Nigeria. En su búsqueda de ser el primer baloncestista con tres oros, Anthony ha batido al mismísimo Jordan en la lista de anotadores de su país en esa competición. Pese a haber sido bendecido por MJ cuando llegó a la Liga, su relación no siempre fue fácil. A parecer, a Jordan le disgustaban las noticias de indisciplina y carácter complicado del joven astro, mientras que Melo también tenía su buena lista de quejas: "¿Por qué siempre tienen que compararnos con Jordan? ¿Por qué nadie nos compara con Magic?"



Dicen que el tiempo todo lo cura y parece haber sido el caso. Ambos han cooperado en actos solidarios y, recientemente, el internacional estadounidense calificó de "brillante" la intervención del mítico 23 para denunciar la tensa situación social que actualmente se vive en el país, tocando un tema tan puntilloso como la violencia policial ante colectivos de la importancia de los afroamericanos. Por aquellos días, el genial jugador había acaparado todos los focos al firmar la friolera de 68 tantos ante una selección con el potencial de Argentina. 



Independientemente se que se cuelgue metal dorado a finales de este mes o que logre al fin llevar a los Knicks a altos puestos del Este, solamente una extraña percepción de la realidad cuestionaría a un crack capaz de hacer lo que Melo hace en una pista. La duda que sí debería permitir es que, habida cuenta de su talento, quizás haya sido rápidamente complaciente consigo mismo en vez de mejorar su juego, añadiendo más esfuerzo y otros ingredientes a un plato que, ya de por sí, es uno de los mejores que pueden encontrarse en cualquier pista del mundo. 



FOTOGRAFÍAS EXTRAÍDAS DE LOS SIGUIENTES ENLACES:



http://www.elperiodico.com/es/noticias/raiz-tematicas-el-periodico/eeuu-sufre-para-doblegar-australia-juegos-rio-baloncesto-5318414



http://www.espn.com/nba/dailydime?page=dime-090530



http://www.zimbio.com/photos/Carmelo+Anthony/Jason+Kidd/Olympics+Day+3+Basketball/CFo4_cxEzzi